Si hay algo de lo que puede presumir Navarra, además de su gastronomía, es su entorno. Y es que este territorio es sinónimo de riqueza cultura y paisajística y, por supuesto, de calidad de vida. El Parque Natural de las Bardenas Reales, con su impresionante paisaje semidesértico y formaciones rocosas, la Selva de Irati, uno de los mayores bosques de hayedos y abetos de Europa, el Monasterio de Leyre, de gran valor histórico o la Foz de Lumbier, un espectacular desfiladero natural, son algunos de los principales atractivos turísticos de una tierra que combina naturaleza, aventura y patrimonio cultural.
Una tierra cuyo atractivo cruza fronteras y que se convierte en protagonista y lugar de visita para miles de turistas. De ahí que venga siendo habitual que publicaciones como la revista 'Viajar', la primera revista de viajes de España, o la prestigiosa revista National Geographic hablen de Navarra y de su riqueza paisajística.
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Una excursión por el Valle de Belagua
Situado en el extremo norte del Valle del Roncal, el Valle de Belagua "tiene en sus cumbres el techo más alto de la comunidad". Desde el Camino de Zemeto hasta una ascensión al Pico de Anie, los amantes de la naturaleza podrán, tal y como así lo señalan, disfrutar del aire puro, el silencio y la belleza de un paraje en el que se pueden realizar otras muchas actividades. "Los amantes del deporte pueden deleitarse en la estación de esquí nórdico Larra-Belagua, mientras que aquellos que prefieran descubrir la gran tradición agrícola y ganadera del valle conocerán costumbres ancestrales que datan de la prehistoria y construcciones tales como bordas y ventas rodeadas de masas forestales como la Reserva Integral de Aztaparreta, el único territorio virgen que queda en el Pirineo", describen desde la revista de viajes.
Inmersión en el desierto de las Bardenas Reales
"Es imposible pasar por alto esta reserva natural con muchos atractivos que ofrecer. Desde la zona este y oeste dedicada a los cultivos hasta el sur, con bosques de pino y matorral, hasta la más visitada, que cubre parte del este y cuenta con las formaciones más espectaculares, inmortalizar sus paisajes es inevitable", describen en la publicación. Un espacio donde disfrutar de una gran riqueza de fauna y flora y también de la fiesta de la Trashumancia en septiembre.
Tradición y naturaleza en el Valle de Ultzama
"El lugar perfecto para mezclar naturaleza, cultura y gastronomía", afirman desde National Geographic. Visitar el robledal milenario del Bosque de Orgi, declarado Área Natural Recreativa, disfrutar de los cursos de equinoterapia que se imparten en el lugar u observar a los pura sangre en la Yeguada de la Ultzama proponen desde la publicación.
Los cuidados pueblos y caseríos repartidos entre los prados, con sus casas blasonadas, cascos urbanos, miradores y muestras artísticas, como las tallas marianas de Belate o la iglesia de Urritzola-Galain, son de obligada visita. También es de visita obligada la Granja Escuela Ultzama, donde aprender sobre las costumbres, cultura y labores del campo y realizar actividades.
Desvelando el misterio de las cuevas de Navarra
"Naturaleza y hechicería se mezclan en la Cueva de las Brujas de Zugarramurdi, un rincón del Valle de Baztan que tiene incluso su propia película. Grandes galerías esculpidas por las aguas del río Orabidea merecen un recorrido y abren la curiosidad del visitante, que podrá conocer más sobre el lugar y su historia en el Museo de las Brujas.
Menos mágica pero igualmente impresionante es la Cueva de Urdazubi / Urdax, a la que se llega por un sendero desde Zugarramurdi. Además, la Cueva de Mendukilo es una puerta a descubrir los misterios de la geología con una visita guiada o el programa de espeleoaventura para los que se atrevan a adentrarse en una actividad de lo más exigente pero emocionante.
Formar parte del imaginario rural
El agroturismo es, tal y como apuntan desde National Geographic, una de las mejores maneras de conectar con un territorio y con la gente que en él habita, además de descubrir el origen de muchos de los productos que usamos o comemos en nuestro día a día.
La ganadería ecológica Sarbil, La Sacristana, la salinera Nuin Eraso, el molino de Zubieta o el yacimiento arqueológico Las Eretas son también de visita obligatoria.
El pincho, el bocado más sagrado
"El mejor lugar para degustar pinchos en Pamplona son las míticas calles de la Estafeta, San Nicolás, la Plaza del Castillo y sus alrededores. Tortillas, chistorra y pulgas de jamón se mezclan con otros pinchos tradicionales, pero los más vanguardistas también sobresalen, sobre todo durante la Semana del Pincho de Navarra, donde varios establecimientos se presentan a concurso para intentar subir sus creaciones de alta cocina a lo más alto del podio", relatan en la publicación.
El vino y la sidra, los elixires de Navarra
"Con una Denominación de Origen propia, la D.O. Navarra, y otra compartida, la D.O. Rioja, esta es sin duda una tierra de vinos reconocida en el mundo entero y para todos los gustos: rosados, blancos, tintos y dulces se muestran al visitante a lo largo de la Ruta del Vino, que recorre las bodegas, bares, alojamientos, restaurantes y viñedos de 25 localidades donde además de catas se puede participar en la vendimia, el pisado de uvas u otras actividades, como la vinoterapia o un paseo entre viñas. Navarra también es tierra de sidra. Las zonas más sidreras son las de Baztan / Bidasoa, donde cada año se celebra un festival gastronómico entorno a este producto, aunque las sidrerías más auténticas se ubican en Beruete, Lekunberri, Lesaka y Lekaroz", apuntan desde National Geographic.
La huerta de Navarra, garantía de sabor
Según relatan, Tudela es una de las localidades con mejor huerta de España por su situación junto a la ribera del Ebro. La alcachofa cuenta con su propia Denominación de Origen, pero le siguen a la zaga espárragos, borrajas, cardos y los conocidos como tomates feos. Tal es su fama que la ciudad celebra la Fiesta de la Verdura cada mes de abril con charlas, talleres, degustaciones y torneos.
En total, Navarra cuenta con seis Denominaciones de Origen, seis Indicaciones Geográficas Protegidas y cuatro Certificaciones de calidad.
Vivir la cultura y el arraigo de sus fiestas
Además de San Fermín, no se puede dejar pasar la oportunidad de disfrutar de otras celebraciones como Fiesta o Bien de Interés Turístico, como el Volatín y La Bajada del Ángel de Tudela, Los Bolantes de Luzaide/Valcarlos o la Procesión de la Pasión de Cristo de Corella.
Otro de los mejores momentos para visitar Navarra es durante el Carnaval, para conocer la historia de Don Carnal y Doña Cuaresma. También destacar el Día de la Almadía o las Javieradas, además de algunas romerías u otros eventos importantes como la Feria de Artesanía de Estella-Lizarra.
El Camino Ignaciano, un recorrido diferente
"El recorrido, mucho menos conocido que el Camino de Santiago, va a contracorriente de este y en la dirección del Camino Real. Recorriendo localidades limítrofes del País Vasco y La Rioja, como Alda, Logroño o Calahorra, a su paso por Navarra se pueden realizar las etapas 5, 6, 12 y 13. La primera de ellas, entre la localidad alavesa de Alda y la navarra de Genevilla; la segunda, de Genevilla a Laguardia, en La Rioja, pasando por Meano o Cabredo, y las dos últimas, de Alfaro a Tudela y de esta a Gallur, visitando lugares de interés, como la Catedral de Tudela o el Castillo de Cortes", apuntan.
Aprender más sobre los deportes rurales
El deporte rural de Navarra se caracteriza por tener como origen los trabajos tradicionales que se realizaban en el campo y en los caseríos. Actividades que aún se practican, y forman parte de muchas de las fiestas culturales de esta comunidad. Algunos de los más famosos son el aizkolari (corte de troncos con hacha), el harrijasotze (levantamiento de piedras) y el sokatira (tira y afloja con una soga por equipos).
Monasterios de la Ribera, tesoros junto al Ebro
"El Monasterio de Santa María de la Oliva es un conjunto monástico que mezcla románico y gótico, el de Fitero, el primer monasterio de la Orden del Cister construido en la Península Ibérica, un Monumento Nacional y una joya arquitectónica de la Edad Media que muestra una gran colección de tesoro y el monasterio de Santa María de Tulebras, el primer cenobio femenino fundado por el Cister en el país", concluye diciendo la publicación.