pamplona - Unai Jáuregui necesitaba un nuevo desafío después de la difícil temporada en Tercera con el Pamplona. Lo ha encontrado.

¿Cómo valora esta oportunidad de entrenar al Izarra?

-Es un reto. Estuve un año en Segunda B y esto es otra forma de estar en la categoría. Con un grupo nuevo para mí. Una oportunidad muy bonito ante la que cada día estoy más ilusionado.

El proyecto va tomando forma con renovaciones de la mayoría de jugadores de Navarra.

-Sí, creo que llevamos alrededor de una decena de renovaciones y se hará algún fichaje. Tanto el club como yo queríamos navarrizar el equipo, dar protagonismo a gente de aquí. A veces traer gente de fuera es una apuesta arriesgada, aunque hay muchos ejemplos de gente que ha venido de fuera y se ha integrado muy bien.

Conoce la exigencia de la categoría.

-Sí, sé dónde me meto. Hay cosas que cambian, como el tema de los viajes. Me dicen que al 90% el grupo será con las comunidades cercanas y los viajes en su mayoría serán en el día. Sabemos dónde nos metemos y sabemos qué es. Por eso me quiero rodear de un cuerpo técnico que me ayude y repartir el trabajo. Habrá un preparador físico, un entrenador de porteros, un fisio y un analista, que me ayude con el tema del vídeo. Quiero hacer un equipo de trabajo bonito, en el que cada uno tenga sus competencias, pero que trabajemos todos en el mismo sentido. Y que toda esa ilusión y todo ese trabajo seamos capaces de transmitirlo a los jugadores.

¿Qué objetivos le pone el Izarra?

-Hay uno claro, que es la salvación. Sería bonito seguir otro año en Segunda B. Sabemos que el presupuesto que tenemos es el que es y por tanto conseguir el objetivo no será sencillo porque la Segunda B cada año se está profesionalizando más, pero a ilusión y a ganas no nos va a ganar nadie. El primer objetivo es mantenerse y después, hasta donde lleguemos.

El presupuesto volverá a ser de los más modestos del grupo.

-Yo creo que sí. Si no es el más bajo, de los más bajos.

Terminó su etapa en el Pamplona con la idea de hacer algo diferente.

-Sí. Tenía claro que en Tercera me iba a costar entrenar, porque mi cuerpo me pedía o descansar, o hacer algo diferente. Ha surgido la oportunidad y la cojo con ganas.

¿Es un reconocimiento a su dedicación como entrenador?

-Sí, te hace ilusión que un equipo de Segunda B te llame. Son diez años seguidos entrenando, cinco en el Pamplona, dos en la Mutilvera y dos más en el Pamplona.

¿Se imagina una Segunda B con cuatro equipos navarros?

-Ojalá suba la Mutilvera. He estado dos años allí y me haría ilusión.